En determinados barrios de Medellín (Colombia) los grupos al margen de la ley, han trazado por años, nuevos contornos.

Un cuerpo sin historia es un proyecto transmedia de gran envergadura, que se plantea preguntas por lo abyecto, la memoria y la identidad. La exploración propone una instalación de dimensiones y medios variables, que le permita al espectador entrar en relación con estas presencias.

Estos paisajes digitales autogenerados con herramientas de Inteligencia Artificial, no corresponden a ningún territorio real, o mejor dicho, son paisajes únicos de una naturaleza artificial.

Entre 1990 y 2000, la Ruta 60 que conecta a Medellín con Bogotá se convirtió en un escenario de terror y muerte. Grupos armados se disputaron la zona.

La instalación está pensada básicamente para resaltar la ausencia y el vacío que se hacen presente en estas imágenes y que bien reflejan el horror de la desaparición

Las pinturas nos muestran los distintos pasajes del territorio colombiano, lo exuberante y desbordado de su naturaleza. Los títulos de las pinturas (algo que no se ve, pero aunado a la obra) nos presentan las voces de quienes estuvieron ahí, en aquel lugar, viviendo la desmesura de esta guerra.

El videoperformance Ser Piedra consiste en una acción cíclica, que me permite a través del dibujo, transformar mi propio cuerpo en un sepulcro.

Las prendas interiores halladas en las fosas comunes roídas por el paso del tiempo, me impactaron porque sentía que allí estaba el horror

Cortometraje documental, que en términos generales busca narrar la historia de una madre colombiana con una vida perturbada tras la desaparición de su hijo.

El concepto de imaginario esta vinculado a las categorías de imaginación e imagen. Los auto-retratos resultantes son el producto de una acción que combina el dibujo con la fotografía.

El río Atrato, el mayor afluente del pacífico colombiano está en peligro. La sed del oro de los humanos se lo come vertiginosamente de adentro para afuera.